sábado, 28 de enero de 2017

Un muro vulgar


Solo un ser irracional como Donald Trump -aunque presidente de un país- se propone hacer un muro sin sentido. La historia de la humanidad tiene ejemplos tan desastrosos -en ese sentido- como la gran Muralla China de 21,916.18 kilómetros. Se los explico, queridos lectores, desde algunas perspectivas.

Cuando el emperador Qin Shi Huang inició la construcción de la gran muralla, en el siglo V antes de nuestra era, las formas de comunicación se reducían a la tracción animal -el  caballo- o la tracción humana, caminar. Es decir, la guerra era el combate cuerpo a cuerpo. Por lo que, para aquel momento- según el criterio del emperador- era viable hacer la muralla para detener el avance de los mongoles. Al final, la historia derrotó a Qin Shi Huang porque su muralla no contuvo el avance de la humanidad.


El posible murito de Trump tiene una extensión de 3,185 kilómetros. Además, hacer una pared -en este período de la humanidad- es tan irrelevante como innecesaria. Primero porque los Estados Unidos es un país que se construyó en base a las migraciones de millones de humanos. El abuelo de Trump un ejemplo más. Entonces, un muro no va a detener la migración. Una hipótesis -con relación al muro- es que Trump quiere, como comerciante simple, vender cemento y hierro.  Porque un muro tampoco detiene el desastre climático, para explicar la irracionalidad de su función.

Por eso, levantar un muro hoy, representa la estupidez en su máxima expresión; primero porque las comunicaciones se han modificado tanto que no tiene sentido intentar poner una barrera física. Todos estamos vinculados a la economía mundial. Alguna parte de la humanidad tiene acceso a un teléfono móvil, que compró en su país pero está hecho con partes de todo el planeta. Entonces, si se compara el costo de hacer el muro contra la productividad de ese dinero en empresas eficientes y amigables con el medio ambiente, incluso, se obtiene más dinero. La sociedad actual es global.

Además, la tecnología de la guerra cambió,  no se hace cuerpo a cuerpo. Por lo que tampoco el muro tiene sentido.  Ahora  la guerra es “inteligente”, con drones y ataques precisos a miles de kilómetros del lugar del combate. Esa tecnología la tiene los militares gringos. Es decir, ese ejército del cual muchos de sus miembros han terminado deschavetados disparando contra la población civil de su patria. Por lo que, esto es un predicción terrible, probablemente un alto mando militar gringo, en alguna alucinación, terminará oprimiendo el botón y destruirá alguna ciudad de su país.  Tengo la certeza que no serán los migrantes económicos.

La explicación para este comportamiento militar es simple. La sicosis que los soldados gringos tienen los lleva a vivir por los linderos de la esquizofrenia. Todo es una conspiración. Incluso Hollywood, si no me cree, ha realizado filmes sobre el tema. Full metal jacket, un film icónico, dirigido por Stanley Kubrick.

Pero el discurso racista, sexista y xenofóbico de Trump es -sin lugar a dudas- una visión malvada de la humanidad. Hay tantos argumentos a favor de la dignidad que esta columna no me alcanzaría, pero EL RESPETO destruye cualquier postura inmoral que este nefasto sujeto tiene. También -a pesar que él no lo comprenda- comparte el mismo código genético con la humanidad. Aunque su capacidad de raciocinio es muy limitada. Él solo sabe ganar haciendo trampa. Allí está su historia en los negocios y quien lo admire es tan perverso como él. Pero hay mil millones de humanos  más que tenemos la postura contraria,  respetamos la vida.

Además, eso de cerrar las fronteras es tan incoherente en la actualidad porque los Estados Unidos no podría vivir con la economía puertas adentro. Vivimos en un mundo globalizado. Su nacionalismo es de bandera izada al final de una guerra. ¡Qué terrible!  No dudo que la maldad de los estrategas que lo acompañan impulsen la guerra y maten a millones de personas. Para ellos, como para el monigote de Trump, es un negocio.

Para las economías locales de Centroamérica, la crisis que se avecina es terrible. Porque la forma de expoliación continua contra nuestros países se agudizará.  También tengo la certeza que los miopes empresarios locales irán a lamer la bota del magnate y ahogaran a sus países en la miseria total, hasta que se arme una revuelta social de proporciones apocalípticas, lo que justificará -en su miseria espiritual- pedir  armas a su gringo favorito.

Yo -como usted querido lector/a- propongo un voto por la dignidad y la paz mundial. Mis palabras una causa. #unmundosinarmas.

2 comentarios:

  1. Yo también doy mi voto por la dignidad y paz mundial #unmundosinarmas

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  2. Qué buen artículo, totalmente de acuerdo con vos

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